Este documento es un relato sobre una amiga que vive momentos difíciles con su familia, pero a pesar de todo continúan juntos.
Ella decía vivimos con mi marido como 12 años, cuando empezamos todo era hermoso, tierno, cálido, pero con el pasar de los años la pobreza entró por la puerta y el amor que es tan débil que se requiere de muchos factores para que persista no se pudo quedar y tuvo que salir por la ventana y sólo quedó un vacío, un sentimiento de culpa, una desesperación sofocante, agresiones física y sicológicas, tanto así que ahora me queda hacer de cuenta que todo está bien. He pensado muchas veces abandonar mi hogar pero no soy capaz de dejar a mis pequeños; también me siento incapaz de enfrentar la vida sin mi pareja, si no soy nada, a veces pienso que me puede ir mejor y tal vez me vaya peor, y un día mis niños me reclamen por haberlo separado de su padre.
